Los pinos se cultivan desde la antigüedad y se aprecian por sus deliciosas semillas. Los aceites esenciales de la corteza están teniendo un mayor interés como medicación adicional para la psoriasis con el fin de reducir los efectos secundarios de la terapia estándar y acortar la duración total del tratamiento.
El pino es originario del Mediterráneo y se cultiva desde la antigüedad.Sus sabrosas semillas se utilizan principalmente en la industria alimentaria y de confitería.
El médico y farmacólogo griego Dioskurides describió las cualidades antiinflamatorias y diuréticas del pino. Para la tos y problemas de vejuga, recomendaba aplastar un cono entero fresco todos los días, cocinarlo en 3 tazas de vino pra consumirlo como bebida. Otras fuentes describen el polvo de la corteza del pino como un buen remedio para tratar la enfermedad de la piel intertrigo.
El efecto antioxidante del picnogenol es 20 veces mayor que el de la vitamina C.
El extracto de pino tiene un efecto antioxidante
El interés científico actual enfoca el extracto de corteza de pino para tratar la psoriasis. Más de 70 estudios en humanos ya han investigado esta mezcla de sustancias activas. Particularmente eficaces son las procianidinas oligoméricas (OPC), sustancias amargas incoloras cuya potencia antioxidante es 20 veces mayor que la de la vitamina C y 40 veces mayor que la de la vitamina E.
La psoriasis es una enfermedad cutánea incurable y no infecciosa de origen incierto. Según la Federación Alemana de Psoriasis, hasta un 3% de la población está afectada. La psoriasis es una enfermedad muy común.
La severidad o intensidad puede variar enormemente y variar desde un eczema seco y escamoso en primavera/otoño hasta rebaños muy virulentos y artritis psoriásica. Desafortunadamente, los fármacos como los corticosteroides, los retinoides o los inmunosupresores muy utilizados en el tratamiento pueden tener una gran variedad de efectos secundarios. En este sentido, existe un interés particular en todas las medidas que puedan aliviar la psoriasis, sobre todo las que puedan reducir la dosis de estos fármacos y sus efectos secundarios.
El tratamiento con pycnogenol redujo el tiempo de tratamiento en un 32%.
Un estudio reciente de la Universidad de Pescara en Italia ha confirmado el enfoque de utilizar sistemáticamente el extracto de corteza de pino. El sustrato del pino francés se utilizó en una dosis diaria de 150 mg en el preparado Pycnogenol®. Unos 72 pacientes fueron tratados durante 12 semanas.
Se midieron los radicales libres en la sangre para monitorizar la reducción del estrés oxidativo. Un grupo de pacientes recibió terapia estándar, el segundo recibienron adicionalmente el preparado Pycnogenol.
Ambas opciones de tratamiento fueron básicamente efectivas, pero las mejorías en el grupo con Pycnogenol fueron más significativas. Por ejemplo, con respecto a una hidratación más intensa de la piel o una reducción de la descamación de la piel. El estrés oxidativo disminuyó. El tiempo de tratamiento se redujo en un 32% y los costos en un 36,4% en promedio, ya que se necesitó menos medicación adicional.
El extracto de corteza de pino es, por lo tanto, una opción terapéutica natural para la psoriasis, que sin duda será objeto de nuevos estudios. Posiblemente también bajo el aspecto de una aplicación local.