Un período prolongado de menstruación se denomina menorragia. En la menorragia, un período menstrual dura de siete a 14 días. Esta pérdida prolongada de sangre a menudo puede causar una deficiencia de hierro. La deficiencia de hierro causada por la pérdida de sangre se puede remediar suplementando hierro.
¿Cuándo se habla de menorragia?
La menorragia ocurre cuando una mujer pierde más de 80 mililitros de sangre durante la menstruación o cuando su período dura más de 7 días. Una consecuencia de la menstruación prolongada puede ser la falta de hierro, la llamada anemia ferropénica. Puede encontrar más información sobre el hierro este artículo general.
La anemia ferropénica se manifiesta, por ejemplo, en fatiga, palidez de la piel e inquietud. Según los médicos, la menstruación prolongada no siempre se trata adecuadamente. Por ejemplo, sólo alrededor del 8% de los pacientes con menorragia reciben suplementos de hierro adicionales.
En el caso de la menstruación prolongada, el tratamiento tiene como objetivo principal normalizar la menstruación. Tan pronto como la fuerza y la duración de la menstruación han vuelto a la normalidad, los síntomas desaparecen inmediatamente.
Un equipo de investigadores escandinavos pudo demostrar que incluso después de un tratamiento adecuado para tratar la menorragia, las reservas de hierro en el cuerpo seguían estando muy agotadas.
Un tratamiento de 12 meses con hierro mejoró los problemas psicológicos y mejoró la calidad de vida.
Un suplemento de hierro puede ayudar
Para reponer las reservas de ferritina en sangre sólo a través de los alimentos, se neceistan años. Por lo tanto, los investigadores recomiendan comenzar de forma temprana con una suplementación de hierro para tratar la menorragia. Esto contrarresta una mayor pérdida de hierro y permite una normalización más rápida de los depósitos de hierro.
Después de 12 meses de tratamiento, la ingesta de hierro mejoró los problemas psicológicos como la ansiedad y la depresión, así como la calidad de vida.
Investigaciones posteriores también han demostrado que el nivel de hierro influye en la psique. Las mujeres que consumen mucho hierro vegetal tienen un riesgo 30-40 % menor de desarrollar el síndrome premenstrual (ver artículos sobre hierro vegetal y SPM).
Además, los estudios han demostrado la importancia de un suministro suficiente de hierro para nuestro microbioma. También hay nuevos hallazgos con respecto a la dosis correcta de consumo de hierro: menos es más.