Hay una tendencia a creer que lo que se ha aprendido, se convierte en la verdad absoluta. Esto no sólo oscurece la percepción y aprendizaje de algo nuevo, sino que también – por ejemplo, en el caso del tratamiento médico de la deficiencia de hierro – se aceptan los efectos secundarios negativos como un mal necesario e indispensable.
Un buen ejemplo de esto ocurre durante la sustitución del hierro. De acuerdo con las directrices, se recomiendan altas dosis de sales de hierro de 50 a 100 mg/día (Fe2+) para tratar la deficiencia de hierro y la anemia ferropénica. Se sabe que muchas mujeres reaccionan con náuseas, dolor de estómago, diarrea o estreñimiento y, por lo tanto, prefieren aceptar las consecuencias de una deficiencia de hierro en lugar de tener que pasar por los efectos secundarios.
Menos es más: Una dosis de hierro bajo es más efectivo que una dosis alta de hierro.
Ya hace 2 años, un nuevo descubrimiento científico se hizo público: las dosis bajas de hierro son más efectivas (y probablemente también más saludables) que las dosis altas de hierro.
Diego Moretti del ETH Zurich (Laboratorio de Nutrición Humana) y sus colegas han demostrado en un estudio que las cantidades más bajas de hierro se absorben mucho más eficientemente que las dosis altas de hierro. Y también explican por qué.
Dado que el exceso de hierro en el cuerpo tiene un efecto tóxico para las células, la absorción de los iones de hierro está estrictamente regulada. El cambio decisivo es el péptido hepcidina identificado en el 2001. Esta sustancia bloquea el transportador celular del hierro, con cuya ayuda los iones de hierro superan las membranas celulares. Si hay suficiente hierro en el cuerpo, el hígado puede producir hepcidina y se puede así regular la absorción de hierro.
Por qué altas cantidades de hierro irritan la membrana mucosa
Moretti y sus colegas han podido demostrar que altas dosis de hierro de 80 a 240 mg por ingestión aumentan de forma demostrable los niveles de hepcidina incluso después de 24 horas, bloqueando así la absorción de hierro. Por lo tanto, la suplementación de hierro dentro de las 24 horas conduce a una menor absorción de hierro y a una mayor presencia de iones de hierro libres en el lumen intestinal. Son precisamente los iones de hierro libres los que se sospecha que irritan la mucosa intestinal, siendo responsables de los efectos secundarios e induciendo estrés oxidativo. También se ha demostrado que cuanto mayor es la dosis de hierro, menor es la tasa de absorción. Lo que también explica la regulación de la hepcidina.
¿Qué hacer en caso de deficiencia de hierro?
Se aconseja administrar hierro en altas dosis en un ritmo de 2 días o bien ofrecerlo en cantidades menores. La forma de hierro vegetal mayor tolerada proviene de la hoja de curry.
Habrá que ver cuánto tiempo necesitaremos para que los nuevos hallazgos sobre el hierro sean aceptados por todos. Hasta entonces, las mujeres que no conocen goodhealthforme.com tienen que combatir su deficiencia de hierro con recomendaciones anticuadas y el riesgo de efectos secundarios.