La degeneración macular relacionada con la edad es una de las enfermedades oculares peligrosas más comunes. Se trata de la llamada mancha amarilla, el punto de la visión más nítida en el ojo interno. Es responsable de alrededor de un tercio de todas las cegueras nuevas y es la principal causa de ceguera entre las personas mayores de 50 años. Aunque desafortunadamente no hay cura, existen algunos enfoques interesantes para el tratamiento y la prevención, especialmente en el área de los micronutrientes.
Cualquier muerte celular en el área de la mancha amarilla se llama degeneración macular. La mancha amarilla se amarillea por la inclusión de carotenoides, colorantes amarillos Como la luteína, la xantina o el betacaroteno. Estos colorantes contienen antioxidantes y unen radicales tóxicos en el ojo, lo que los hace extremadamente importantes para la salud ocular.
La degeneración macular es la principal causa de ceguera en personas mayores de 50 años y es responsable de un tercio de ceguera en general.
Hay una forma seca de degeneración macular que ocurre mucho más frecuentemente (85%) y muere en los vasos, y una forma húmeda (15%). Desafortunadamente, la forma seca a veces puede volverse húmeda. El precursor de una enfermedad macular son las drusas. Estas son pequeñas acumulaciones de grasas y productos de degradación de las células debajo de la retina.
En la degeneración macular, las células responsables de la visión aguda y del color generalmente mueren en el medio de la retina. Estos se llaman bastoncillos y son responsables del color y de la visión en una baja condición de luminosidad. Como resultado, la región de la visión más nítida de la retina pierde lentamente su función, provocando discapacidades visuales severas, e incluso la ceguera.
¿Cómo se desarrolla la calcificación de la retina?
La degeneración macular ocurre especialmente en la vejez, es decir, debido a la edad. Como el aumento de la edad se asocia con la calcificación vascular y Como en en la degeneración macular, también se calcifican los vasos finos de la coroides, esta enfermedad ocular también se denomina «calcificación retinal». Las causas de la enfermedad aún no se conocen por completo. Cambios genéticos en las proteínas se encuentran comúnmente en la degeneración macular. Pero los fumadores están, a menudo, más afectados por esta enfermedad. La luz ultravioleta, que también contiene radiación dañina, puede ser también una de las causas. La falta de minerales y / o vitamina A y carotenoides (precursores de la vitamina A) también puede ser perjudicial. La degeneración macular es menos común en la adolescencia (degeneración macular juvenil), ya que es causada por cambios genéticos.
Primeros síntomas de una enfermedad
La enfermedad es indolora y, por lo tanto, a menudo no se diagnostica a tiempo. En esta enfermedad las células receptoras (conos) para la visión del color y para la visión en una baja condición de visibilidad (bastoncillos), en el medio de la retina ya no reaccionan adecuadamente, por lo que las letras y las palabras se reconocen durante la lectura cada vez menos. El primer signo de esta condición se reconoce si al leer las cuadrículas se perciben combadas, cuyo caso se debería acudir al oftalmólogo. Finalmente, pierdes la capacidad de lectura por completo. En la forma húmeda, inicialmente se puede provocar por una acumulación de líquido (edema) en la retina que se relaciona con una visión distorsionada. Por ejemplo, el patrón rectangular de azulejos es ondulado y se percibe con ondas.
Ante los primeros signos de mala visión, se debe consultar a un médico lo antes posible para un examen detallado y una aclaración de la afección.
El diagnóstico del fondo del ojo se puede llevar a cabo por el oftalmólogo con el oftalmoscopio o con la ayuda de lupas. Con el fin de detectar vasos sanguíneos recién formados en el contexto de la enfermedad, se inyecta un tinte en la vena para ver su distribución en la coroides y la retina (angiografía). Un análisis detallado de las capas de la retina individuales se consigue con un procedimiento con láser (tomografía de coherencia óptica TCO), que se puede medir drusas, pequeñas burbujas, retención de líquidos y membranas vasculares de forma precisa. Dado que el epitelio del pigmento, que se encuentra entre las células receptoras y la coroides, es responsable de la eliminación de los productos de desecho, también se ve afectado, uno puede ver los cambios en la densidad del pigmento.
¿Qué papel juega la nutrición?
Diversos estudios sugieren que la ingestión de diversos micronutrientes antioxidantes puede permitir el cese o al menos un retraso en la progresión de la enfermedad. Especialmente una combinación de betacaroteno, vitaminas C y E y zinc, pueden ayudar a frenar de forma efectiva la enfermedad y reducir la pérdida moderada de la visión.
La ingesta alta de ácidos grasos Omega 3 puede reducir el riesgo de degeneración macular en un 40%
Particularmente prometedor, especialmente en la prevención de la degeneración macular, parece ser un suministro adecuado de ácidos grasos Omega 3. Así lo demuestra un estudio a gran escala realizado por el Instituto Nacional de Salud en EE. UU. donde el riesgo se redujo hasta en un 40%. Estos valiosos ácidos grasos, como el ácido docosahexaenoico (DHA) o el ácido eicosapentaenoico (EPA), pueden administrarse fácilmente a través de suplementos apropiados o una dieta rica en pescado. Sólo alrededor del 5% de la población estadounidense ingiere la cantidad recomendada de ácidos grasos Omega 3, lo que demuestra el enorme potencial de estos valiosos nutrientes.
Efecto similar para retardar la progresión de la degeneración macular se atribuye a una ingesta de carotenoides como la luteína, zeaxantina u otros nutrientes antioxidantes como la vitamina D o la coenzima Q10.
LOS PACIENTES CON DME TENÍAN UN 15% MENOS DE NIVELES DE VITAMINA D QUE LAS PERSONAS SANAS.
¿Qué papel juega la vitamina D en la degeneración macular?
En una evaluación a gran escala de numerosos estudios, investigadores franceses encontraron que los pacientes con degeneración macular tenían un nivel de vitamina D 15% menor que los pacientes sanos. Además, pudieron observar que las concentraciones inferiores a 50 nmol/l, es decir, una deficiencia aguda de vitamina D, están asociadas con la degeneración macular en la fase final. En esta etapa, la agudeza visual disminuye considerablemente y a menudo es necesario el cuidado de terceros.
La sospecha de que existe una conexión entre un bajo nivel de vitamina D y la degeneración macular relacionada con la edad es, por lo tanto, cada vez más fuerte.
Estudios adicionales demostrarán cómo la vitamina D puede detener o al menos retrasar la DME. Pero definitivamente podemos esperar resultados más prometedores.
La DME causa altos costos de atención para los pacientes con trastornos visuales graves. Por lo tanto, un suplemento económico con vitamina D ahorra costos en la segurodad social.
Las vitaminas (especialmente C y E) y los micronutrientes (betacaroteno, selenio, zinc) también pueden aliviar un poco la DME y posiblemente retrasar su progresión.
¿Cómo se trata la degeneración macular?
En el tratamiento quirúrgico de la forma húmeda de la degeneración macular, se pretende destruir la neovascularización. Esto se consigue por medio de láser si estos cambios no se encuentran exactamente en el centro de la retina. Otro método es la inyección de factores de crecimiento anti-vasculares en el ojo. El efecto de los fármacos utilizados en este caso, que inhiben la formación de nuevos Vasos dura sólo de cuatro a seis semanas. A partir de entonces, se deberían repetir las inyeccione de forma continua. La inyección tiene lugar bajo el efecto de aturdimiento por goteo y es en gran parte indolora.
Una ayuda adicional para aumentar la agudeza visual, la forman las lupas.
Abstenerse de fumar y un estilo de vida generalmente saludable se encuentran entre las principales medidas preventivas contra la degeneración macular. Gafas de sol con la protección UV adecuada y una dieta equilibrada, con una ingesta adecuada de carotenoide y ácidos grasos Omega 3 tienen un efecto preventivo, lo que puede contruibuir a una forma más leve de esta degeneración macular, más tardía o incluso a no obtenerla.