Es un círculo vicioso: en el curso de la diabetes, una enfermedad diabética, se pierde la protección contra los peligrosos radicales libres. La protección mediante antioxidantes que atrapan radicales, como la cúrcuma, sería particularmente urgente.
Muy pocos captadores de radicales en el cuerpo
Si nuestro organismo ya no puede captar suficientemente los radicales libres nocivos, sufre de estrés oxidativo. Los más importantes «interceptores» contra esta paz perturbadora son antioxidantes como las vitaminas C y E o ciertas sustancias vegetales como las sustancias del té verde. Estos pueden reducir el gran aumento del estrés oxidativo que se acumula en la diabetes.
No todos los antioxidante son iguales
Hoy en día, sin embargo, sabemos que no todos los antioxidantes son igualmente efectivos. Esta es una de las razones por las que se siguen buscando alternativas a los «clásicos» captadores de radicales. Por lo tanto, nuevos estudios se han concentrado en la cúrcuma, botánicamente conocida como cúrcuma longa. Las sustancias naturales contenidas en la planta, especialmente la curcumina, se han hecho un nombre en la medicina nutricional desde hace mucho tiempo debido a su amplio espectro de efectos. Puede encontrar más información sobre la cúrcuma aquí.
¿Curcuma y pimienta negra como un dúo potente?
Un tratamiento de 3 meses con cúrcuma redujo el estrés oxidativo de los diabéticos en un 22%.
Investigadores iraníes de la Universidad de Teherán y un equipo internacional han investigado el potencial terapéutico de la curcuma. Durante tres meses, administraron 1.000 mg de curcumina o un placebo diariamente a 118 diabéticos.
Para aumentar la menor biodisponibilidad de la curcumina en su forma pura, también utilizaron 10 mg de piperina -un extracto de pimienta negra- en el grupo de la curcuma, lo que facilitó la disponibilidad de la curcumina en el organismo.
El resultado: el estrés oxidativo en el grupo de la curcuma se redujo en casi un cuarto, es decir, en un 22 por ciento. Permaneció alta en el grupo de placebo.
Además, la actividad de la enzima antioxidante superóxido dismutasa – particularmente importante para la reducción de los radicales de oxígeno altamente reactivos – aumentó en un 11 por ciento. La capacidad antioxidante total incluso aumentó en un 21 por ciento. A modo de comparación, los dos valores se deterioraron en 12 y 17 por ciento respectivamente en el grupo de placebo. La curcumina en combinación con la pimienta negra puede ser una medida de acompañamiento interesante y sobre todo segura para los diabéticos.
Como sucede tan a menudo, se puede esperar la confirmación y profundización de estos y otros resultados del estudio, especialmente en estudios aún más grandes. Una vez más se ha demostrado que la curcuma puede utilizarse para una amplia variedad de aplicaciones. En este contexto, se hace referencia a su uso como antidepresivo, contra enfermedades intestinales inflamatorias crónicas o estudios sobre su efecto inhibidor del cáncer.